Identifican la vía de síntesis de un cofactor enzimático clave en el metabolismo celular de tripanosomas

Estudiando la síntesis del ácido lipoico (AL) en tripanosomátidos, investigadoras e investigadores del IBR describieron un modelo que podría ayudar a seleccionar quimioterapias más eficientes para el tratamiento de enfermedades causadas por tripanosomas, como la Enfermedad de Chagas.

El AL se encuentra en todas las células, desde las bacterias hasta los humanos y participa de funciones clave del metabolismo celular actuando como un cofactor esencial de complejos enzimáticos de vías oxidativas. La presencia o ausencia de los cofactores define la posibilidad de que una determinada reacción ocurra dentro de la célula y por eso son muy importantes para comprender cómo suceden los procesos biológicos, además de atractivos blancos para el diseño de drogas novedosas.

El AL puede sintetizarse de diferentes maneras, la más compleja es la llamada “lipoyl-relay”. Esta ruta ha sido descripta hasta ahora en bacterias, levaduras, nematodos y seres humanos. Este trabajo de investigación liderado por Cecilia Mansilla y Antonio Uttaro, permitió reunir la evidencia para proponer por primera vez que la vía lipoyl-relay también está presente en los protozoarios.

Utilizando una estrategia de genética reversa con cepas mutantes de levaduras y bacterias que tienen afectadas la síntesis de AL, pudieron identificar diferentes enzimas del parásito necesarias para la síntesis de este cofactor. Asimismo, postularon a la enzima amidotransferasa de tripanosomas como blanco de análogos del AL. Estos compuestos tienen una estructura muy similar al AL pero no pueden cumplir su función. Por lo tanto, al ocupar los sitios en las enzimas que usualmente ocuparía el AL, impiden que el mismo se una a la enzima y provocan, como consecuencia, que ésta ya no pueda funcionar correctamente, generando diversas dificultades en el crecimiento de Trypanosoma cruzi.

Con estos resultados, el grupo propone que podría usarse la interrupción de la biosíntesis del AL como una estrategia para el desarrollo de antiparasitarios para combatir a los tripanosomátidos, como T. cruzi , Leishmania y T. brucei.

Felicitamos a los autores Albertina Scattolini, Antonela Lavatelli, Paola Vacchina, Daniel Lambruschi, Cecilia Mansilla y Antonio Uttaro por este aporte al conocimiento del metabolismo de los tripanosomátidos con posibles aplicaciones en el campo de la medicina!